¿Por qué XBRL?

Las empresas tienen obligaciones con las sociedades donde operan. Una de ellas es informar de sus estados financieros, cuenta de resultados, etc. tanto a las Autoridades Supervisoras como al Público en general.

Para poder mejor entender la información financiera de distintas empresas, el Regulador publica una Normativa a la que las empresas deben ajustarse. Cada vez más, se tiende a que la Normativa sea internacional (aún con las adaptaciones nacionales necesarias). De esta manera, por ejemplo, se facilita comparar empresas tanto en el ámbito nacional como en el internacional.

Las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF, del inglés International Financial Reporting Standards IFRS) se están adoptando, con las adpataciones nacionales necesarias, en prácticamente todos los países que cuentan con mercados financieros abiertos. En el ámbito de las entidades financieras, están los acuerdos de Basilea, que han dado lugar a los modelos COREP, FINREP (Banca) y de Solvencia II (Seguros) en el ámbito de la Unión Europea.

Ademas de la normativa contable, se precisa una normativa informática para que los estados financieros se puedan transmitir entre los ordenadores y, en su caso, ser publicados en Internet. La normativa informática es el XBRL (eXtensible Business Reporting Language, o Lenguaje Extensible de Información Empresarial), lenguaje de libre uso, basado en los estándares XML (la base de Internet), que permite la interoperabilidad y análisis de cualquier tipo de información financiera y empresarial.

La empresa, independientemente del sistema de información que utilice, ha de generar sus informes financieros de acuerdo con tanto la normativa contable (NIIF/IFRS, por ejemplo) como con su formato de datos XBRL correspondiente. Si bien todos los sistemas de información son capaces de generar formatos impresos (por ejemplo PDF), muchos no tratan todavía XBRL. Y aunque generen XBRL ¿cómo estar seguro que el XBRL generado tiene exactamente la información que debe tener? Siempre puede haber errores de programa, o hasta confusiones entre el fichero generado y el que realmente se envía.

Tradicionalmente, los informes financieros, llegado el plazo, se imprimían en papel (o se escribían a mano) y el Directivo Responsable los leía, los firmaba autógrafamente, y se enviaban al Spervisor. Actualmente se precisa un programa informático que genere un fichero XBRL en el plazo prescrito, y es ese fichero informático (y no ninguna copia en papel) lo que el Directivo Responsable firma digitalmente y envía al Supervisor.

En el mercado hay muchas herramientas XBRL. La solución aquí presentada, basada en la ubicua herramienta de hoja de cálculo Excel, es muy sencilla de usar, tanto para generar informes financieros en XBRL (desde Excel o desde ficheros planos código-valor), como para comprobar (dejando inclusive pruebas forenses) que el informe XBRL contenga exactamente lo que tenga que contener (principio de los cuatro ojos). Y todo ello con la máxima seguridad, sin ninguna conexión externa.